Vía Administrativa
Es el proceso más común y se basa en el principio del "iure sanguinis" o derecho de sangre, lo que significa que la ciudadanía italiana se transmite de generación en generación por línea paterna o materna.
En este proceso, los solicitantes pueden presentar la documentación necesaria que demuestre su vínculo con un ancestro italiano y, en caso de cumplir con los requisitos establecidos por la ley, podrán obtener la ciudadanía italiana por vía administrativa. Se puede tramitar en el Consulado de residencia o en Italia en el comune deseado.
Vía Judicial
Es una opción para aquellos casos en los que la ciudadanía italiana no puede ser obtenida por vía administrativa. Este proceso se basa en la ley de "iure sanguinis" o derecho de sangre, pero en este caso se acude a un juez para que determine si se cumplen los requisitos para obtener la ciudadanía italiana. Los solicitantes deben presentar pruebas documentales y evidencia de su vínculo con un ancestro italiano, y el proceso puede ser largo y costoso.
El caso más común es cuando se tiene una mujer en linea de descendencia cuyo hijo/a nació ANTES de 1948, año en el cual se le reconoce el derecho de trasmision de ciudadanía a las mujeres.
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